Ya sea que ustedes padezcan por tener mucho vello facial o que se afeiten solo algunos días de la semana, estarán de acuerdo cuando les digo que la elección de la afeitadora es esencial. Vamos, los hombres no nos fijamos si suelta aloe vera mientras la usas o de qué color es, pero sí que no nos vaya a dejar la cara llena de heridas. Y casi todas son del mismo precio, excepto la que les presentaremos hoy.
Se llama Zafirro iridium y cuesta US$100.000. Ustedes se preguntarán si viene incluida una de esas modelos que continuamente aparecen en los anuncios de TV, la piel de un hipogrifo o el último huevo de dodo sobre la Tierra. Y no, lo que sucede es que esta afeitadora está hecha de iridio, que como todos sabemos no se puede comprar en cualquier lado. De hecho, la variedad con la que está fabricado el mango es más densa de lo usual. Pero ¿y las navajas? Son hipoalergénicas, lo cual no justifica el precio elevado. Lo que sí lo hace es que son de zafiro. Nada más.
La verdad es que lo que a mí me preocupa, sin contar el precio, son precisamente las navajas. Digo, no es como si las pudieras encontrar en el supermercado. Pero resulta que no son desechables, sino que por su proceso de fabricación, el filo dura bastante tiempo. La empresa, Bright Light Ventures, ofrece además 10 años de servicio, por si se llegase a necesitar afilar las hojas de la afeitadora.
Si están pensando en comprarse una, corran. Solo hay 99 en existencia, dada la rareza de los materiales con los que está hecha. Pero algo me dice que no van a encontrarse con una fila muy larga.
Se llama Zafirro iridium y cuesta US$100.000. Ustedes se preguntarán si viene incluida una de esas modelos que continuamente aparecen en los anuncios de TV, la piel de un hipogrifo o el último huevo de dodo sobre la Tierra. Y no, lo que sucede es que esta afeitadora está hecha de iridio, que como todos sabemos no se puede comprar en cualquier lado. De hecho, la variedad con la que está fabricado el mango es más densa de lo usual. Pero ¿y las navajas? Son hipoalergénicas, lo cual no justifica el precio elevado. Lo que sí lo hace es que son de zafiro. Nada más.
La verdad es que lo que a mí me preocupa, sin contar el precio, son precisamente las navajas. Digo, no es como si las pudieras encontrar en el supermercado. Pero resulta que no son desechables, sino que por su proceso de fabricación, el filo dura bastante tiempo. La empresa, Bright Light Ventures, ofrece además 10 años de servicio, por si se llegase a necesitar afilar las hojas de la afeitadora.
Si están pensando en comprarse una, corran. Solo hay 99 en existencia, dada la rareza de los materiales con los que está hecha. Pero algo me dice que no van a encontrarse con una fila muy larga.
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